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BUCANERITA

Todo está...

Todo está...

Todo está en no cerrar las puertas a la vida nosotros mismos. Es nuestra mente quien decide la realidad de las cosas. La existencia es un sueño desgranado.

Me gusta un entorno variopinto en personajes, sin acepción para la amistad, con capacidad de albergar la tolerancia en grado sumo. Un lugar sin elitismos ni arrabales.

La sombra del fracaso se diluye para terminar siendo humo embotellado. Sólo es enorme la sombra del mal, infatigable viajera en pos de su presa; pero destituiré toda manzana tocada.

No me recluiré en la noche, pues cada día dejo el abandono colgado en el perchero. El polvo y la polilla lo terminarán carcomiendo. Mi mano de aire rozará esa piel aún desconocida, y el peso de mi entraña se hará leve para el vuelo.

Sé que no me hará falta frotar la lámpara.

Sakkarah

A veces.

A veces.

A veces al tener mi mano entre la tuya,
te amo tanto que creo que te aprieto,
que lo tienes que notar.
Cuando me vas a besar
se detiene mi corazón,
es tanto el deseo, es tanto el amor?.

Si pudiera pasar la vida
envuelta en tus caricias,
si cada beso hiciera de la vida
una eternidad, y de la distancia
un simple polvo de estrella?

Escuchar las melodías a tu lado
y querer vivirlas
y querer fundirme
en un baile apasionado
y sentir miedo de tanto amor.
Asustarme yo misma
de esta pasión que siento

Al despedirme de ti, guardo silencio.
Un silencio de preguntas,
queriendo adivinar
cuando será la próxima vez.
Una tristeza de saber que yo me quedo
y que mi vida sigue su viaje.
Se me desgarra el alma

Sakkarah

Mercurio se encoge.

Mercurio se encoge.

Mercurio se encoge, y yo aquí preocupada en mis problemas. Se le han abierto varios cráteres repentinamente, igual que a mí. El alma se resquebraja, y uno no sabe que hacer, sólo que tiene que seguir. Sólo hay dos opciones, muerte o vida, y de momento voy apostando por la vida.

Mercurio ha dado muchos dolores de cabeza a la astronomía; mi corazón está haciendo lo mismo conmigo. Ellos van cogiéndole el tranquillo, yo de momento no me hago con el; pero se me van presentando las cosas con claridad, tal como son. La verdad siempre suele salir a la luz.

Mercurio es el planeta más cercano al sol, y este último es el único capaz de adormecer mis penas, de hacerme sentir bien.

No sé si Mercurio va perdiendo parte de su núcleo, pero tengo claro que yo ya no voy a perder más valores por cosas que no merecen la pena.

Sakkarah

El fuerte viento...

El fuerte viento...

El fuerte viento de la vida va desnudando mi alma. Sin protección me expongo, tanto a los rayos de luz solar, como a las brumas. La lluvia de mis ojos de nube regó senderos intransitados, y cada tormenta me sacudió, y zarandeó sin piedad. Aún en pie, trato de sostenerme en el corto espacio que el tiempo ya me brinde.

Mis manos intentaron amasar ternuras, quedando vacías al escapar el aire entre sus dedos. Se entrelazan una a otra, apoyándose en su soledad.

Dañada fui en cada comparación. Ni cielo, ni agua. Tierra árida donde las flores no crecieron.

El alma no tiene piel que se pueda acariciar, pero mil alfileres se van clavando en ella, dándole la forma de un sentimiento.

Sakkarah

Si algo...

Si algo...

Si algo quiero sepultar, no muere
Sino que ata a la condena.

Dejo abiertas mis manos a la caricia del aire,
O al roce de la sorpresa, de lo desconocido.

Él mermó el cupo de su santuario,
Y yo amplio mi capa de acogida
Preparada para un gran vuelo

Hay un hilo de seda
que quiero cortar sin lastimarme los dedos.
Se hace resistente al dolor, se multiplica.

Ya no se descuelga rocío por las pestañas
Y no es duro el corazón,
Pero la esperanza es compacta.
Un duro bloque de granito.

Entre dos sombras camino
Voy haciéndome paso hacia la luz
Agotador sendero al que no veo fin

Sakkarah

Expiacion. Más allá de la pasión

Expiacion. Más allá de la pasión

Estaba empecina en mantener en mí la pasión de un amor al que pusieron fin. De nada sirve luchar contra las causas.

Hoy doy descanso a mi alma, convencida de que pervivirá más allá de mí, de él; en cada novela que trate sobre amores truncados. Le besaré en los labios de cada lector, ellos recrearán mis caricias, y revivirán mi dolor.

El sentimiento puro, tiene un latido eterno que nada ni nadie puede acallar.

Sakkarah

El amor en los tiempos del cólera.

El amor en los tiempos del cólera.

No concibo un amor donde el otro no sea mi centro, o yo no sea el de él. Un amor de enamorado compartido, no sólo no es un gran amor, sino siquiera le podría dar ese nombre a ese sentimiento.

Si uno ama con locura y no puede vivir el amor, lo guarda en una urna de cristal, entre algodones, con cintas que lleven los colores del iris, y...se decide a vivir. Puede ser una larga espera, puede merecer la pena o no; pero como no queda otro remedio, se saca un bloc para empezar a enumerar las aventuras que le harán a uno sentirse vivo durante la conservación del gran sueño.

Quien sabe si después de 623 interesantes apuestas, se pueda retomar el gran amor por el que se vive. Un instante de felicidad total puede acontecer, o no; pero sí se puede mantener una esperanza aprovechada.

Quizá una gran experiencia llegue a lograr que todo sea posible.

Es tu alma.

Es tu alma.

Es tu alma el tesoro que llevo guardado en el velero de mis sueños. El hallazgo que me llenó de felicidad.

Sakkarah

Me falta...

Me falta...

 Me falta el empuje del viento,
Van mis pasos cansados de soledad.
Largo el camino de quién sabe dónde.
Agobia la losa de lo que no fue nunca.

Ni tristeza me queda en las manos.
La sombra me rodea
Inerte estoy en su círculo
Y no deseo la luz.

Ya no admiro a las aves
Ni anhelo la hierba bajo mi cuerpo
Pétalos desparramados
Y verdín en la piel de mis manos

Todo lo aniquilo.

Sakkarah

Mis pasos...

Mis pasos...

Mis pasos resuenan en un lugar cualquiera, vacilan, quisieran detenerse, pero deben seguir arrastrándose pues el camino hay que andarlo. No hay una aventura en el horizonte, ni nada que señale un futuro; solo una bruma negra atenaza los ojos.

Ya no hay nada delicado que cuidar, pues los añicos no pueden ya romperse. Detrás de una puerta buscaré el silencio.

No rutila la luz en las farolas, hoy hubo apagón general en mi mundo.

Sakkarah

Siempre pintan...

Siempre pintan...

Siempre pintan de manera espectacular el paso de la muerte. Una luz, los seres más queridos que te tienden los brazos…

Pero cuando uno dice que ha muerto en vida, que a veces se dice, ¿cómo es ese paso? Días negros en el que se va bajando a un pozo que parece que nunca tendrá fondo, y después una lenta recuperación hasta ver una tenue luz de vida.

Por eso me pregunto, si esas personas que creen haber muerto y vuelto, no estarán equivocadas. Si ese alivio que cree sentirse no lo da la inconsciencia que hace dejar de sentir dolor. Puede ser que el paso de la muerte sea parecido a esa muerte en vida. Que al morir vayas a un pozo profundo y angustioso, y que cueste recuperarse hasta haber alcanzado algo que ya tenias en vida, o parecido.

Claro que yo prefiero pensar y suelo pensar que no, que es una liberación hacia algo mejor. Lo normal es pensar lo que más nos interesa.

Sakkarah

El tiempo.

El tiempo.

El tiempo lo hice eternidad para amarte.
Vagaba entre la bruma buscándote.
El sol calentó de pronto al encontrarte
y mi corazón empezó a cobrar vida.

Tu mirada tierna me hacía estremecer,
tus manos eran fuego que me abrasaba.
Acariciar tu pelo,
sentir lo aterciopelado de tu piel....
Susurré, cual la brisa, a tu oído mil palabras de amor.
De ese amor que me desbordaba, que me invadía.

En mis vuelos, en mis sueños, creí alcanzarte.
Pensé que me amabas, que tu también me adorabas.
Eso me llenaba de felicidad.
Pero mis alas, tan cortas no pudieron rozarte,
solo fue un espejismo;
mis suaves plumas no llegaron a rozar tu corazón

Sakkarah

En la nada.

En la nada.

 En la nada de tu rostro veo ausencia
En tu pupila no se ve le reflejo
de esta imaginaria llama que de mis ojos sale
al mirarte siempre ausente.
Hoy, apagados, quizá haga que los tuyos cobren vida.
No extendiste tu mano sobre la herida abierta
El frío cubre nuestros rostros.

Hierático, lograste turbar mi propósito,
Y el desconsuelo me cubre.
Que no acabe tarde este silencio,
Que no venga la caricia tras el vuelo.

Una leyenda habla de mi tristeza
De unos ojos fijos, despiadados,
Que se dan la vuelta.

Quedo al amparo de la incertidumbre.
Mañana he de partir, allí,
Donde tu voz ya no alcanza.

Sakkarah

Nos quejamos.

Nos quejamos.

Nos quejamos siempre de lo que tenemos o vivimos. Y, en realidad, ya no sabríamos vivir en otro tiempo.

Por ejemplo, el antiguo bastardo, un ser que sin culpa ninguna se hablaba de él con desprecio, y del que todo el mundo aseguraba que había sido fruto de una violación; cuando, con toda seguridad era fruto del amor. De un amor prohibido?

Yo no entiendo que el amor pueda ser prohibido si es verdadero amor. Se podrían prohibir miles de cosas, pero el amor?

Dicen que la figura del bastardo procede del concepto de pureza racial. Ironías de la vida?Hitler, un bastardo, se obsesionó con la pureza de la raza. A veces, cuando nos vemos marcados por lo que se cree un defecto, nos volvemos los peores críticos de nosotros mismos, pero, por supuesto trasladando las consecuencias a los demás?

Así es la vida.

Sakkarah

Los pétalos...

Los pétalos...

 Los pétalos cayeron de tu piel
pero aún los días se asoman a tus labios.
Silencio, es hora de guardar silencio.

Ausente el brillo en la mirada
las pupilas quietas
los párpados abatidos,
piensas.

Se respira sentimiento
el aire mueve infinitos aromas.
Aspiras vida

No, hoy no mueres.

Sakkarah

Eras...

Eras...

Eras un paquete de regalo que quise apresar. Tanto lo apuré que desfondé la caja y caíste vertiginosamente hasta perderte saliéndote de mis sueños.

Manan las fuentes del amor haciendo ríos que van siempre a tu encuentro, pero por norma te encuentras ausente de sus cauces.

Te acercaría a besos, como si fuesen del amor ventosas; pero buscando entre el aire siempre te desvaneces. Estás hecho de ausencia, con piel de futuras melancolías, pies de olvido.

Se extingue tu nombre en mi corazón pasando a apoderarse de todo el recinto. Me quemas, dejándome en cenizas.

Ya me encuentro fatigada de tristezas.

Sakkarah

Dar un golpecito.

Dar un golpecito.

Dar un golpecito a las palabras para comprobar su sonido. Poner el oído por si suenan a hueco; pero más factible mirar a los ojos para no equivocarse.

Cubrimos los olvidos con capas de dolor, cuando se merecían abrigos de indiferencia. El hambre de amor se cubre con ausencia, y a la separación le regalamos lágrimas. Creemos que un corazón se cura con sólo pasarle la bayeta.

Como bebida espumosa caerá el abandono dibujándose en el aire. Una huella insertada en la galaxia será tu recuerdo, y allí, yo, abrazada a la luna, me descolgaré del amor.

Sakkarah

Las palabras...

Las palabras...

Las palabras salen sin dificultad, incluso pueden hacer de nosotros los mejores actores.

Hay quien habla de libertad, y sólo entiende la libertad del otro si se deja ejercer control. En cuanto no se deja, ya viene el insulto, ya es mala persona, cobarde, o cualquier otro apelativo.

Lo mismo pasa con las personas que no son capaces de sentimientos nobles, los que sólo saben basar todo en el sexo. Para estas personas decir amor, es decir: echo varios polvos. Y claro en una mente cerrada a un sentimiento menos carnal, no puede caber una relación de amistad entre hombre - mujer; y al resto le achacan moverse por las mismas necesidades que ellos tienen. Vamos que si tienen dibujados los genitales en el cerebro, se piensan que el resto se mueven por ellos. Con esto no quiero decir que la sexualidad sea algo malo, todo tiene su medida, y es parte muy importante en una relación de amor; pero siempre acompañada de una cabeza suficientemente amueblada, donde hay algo más que unos genitales colgando.

Dicen que cree el ladrón que todos son de su condición, y es totalmente cierto. Yo también me pregunto: ¿qué motivos puede tener una persona para intentar controlar a otro?

Sakkarah

Cambiar el mundo.

Cambiar el mundo.

Cambiar el mundo no es cosa fácil, pero, como bien dicen: " Un grano no hace granero pero ayuda al compañero". Hay muchas formas de aportar, y cada uno lo debe hacer desde sus posibilidades, por limitadas que estas sean.

Una idea que corre, es una semilla que en algún lugar se posa y crece. No despreciemos la escritura como una forma de denunciar la injusticia y, a su vez de narrar o poetizar sobre lo hermoso.

No todo el mundo tenemos facilidad de expresión, pero aquellos que la tengan, la deberían desempolvar para poder enriquecernos con la diversidad. Al hablar de expresión, no sólo me refiero a la palabra, porque hay mil formas de hacerlo. Todo artista nos va abriendo un balcón al mundo, y artes hay muchas.

Sakkarah

Un tic-tac.

Un tic-tac.

Un tic-tac amortiguado, casi imperceptible. La melancolía se extiende como el aceite, y la mirada no se posa nunca, pasa rápida, desinteresada. Ya nada hay que ver con los ojos del alma, la gruesa puerta se cerró.

El misterio yace olvidado. ¿Para que descubrir lo que jamás será mío?. En un mar se pierde el pensamiento, en un fondo de corales olvidado.

En los puentes me siento sin atravesarlos, descanso apoyada en la piedra, y el pulso late muy despacio. Abajo siempre corre el agua, y la vida con ella.

Baja el cielo a mis manos cada día, y se lleva mi caricia. En una brisa se aleja como todo lo que toco. Después miro con mis ojos ausentes y camaleónicos. En ellos se representa cada etapa, cada despedida, cada encuentro. No saben retener el color para pintar un lienzo, un gran amor.

Sakkarah